jueves, 26 de febrero de 2015

Una idea para envolver galletas

El post de hoy es de esos tontos, tontos, tontos pero que puede que os venga bien :-)

Normalmente, cuando hago galletas, suelen ser galletas decoradas, ya sea con glasa o con fondant, y las envuelvo de una en una en bolsitas de celofán cerradas con una solapita de papel bonito, con wasi tape o con un lacito de hilo o cuerda o un lacito rizado (id pinchando y veréis ejemplos de todo).

Si hago galletas "normales" sin decorar, tipo galletas con Lacasitos, cookies, etc, como hago muchas, las meto en una caja bonita y listo.
Pero, ¿qué hacer cuando quieres regalar solo unas pocas galletitas "normales"? ¿Cómo presentarlas para que queden monas y el regalito luzca?


Esta fue la pregunta a la que me enfrenté cuando quise regalar unas cuantas galletas de las mías de mantequilla, de las que utilizo para decorar pero sin decorar, ellas solitas, unas de mantequilla y otras de chocolate, sin más. Eran solo un detallito para la madre de mi amiga Carmen, que le gustan mucho. ¿Cómo envolverlas?

Y después de plantearos estas cuestiones tan trascendentales (jeje), llego con mi propuesta tonta.

Necesitamos:

Galletas (obvio).
Papel celofán trasparente, de color o decorado.
Un lazo bonito.


Aquí os muestro el paso a paso ejecutado por mi mediano (¡sí, se muerde las uñas! ¡qué le vamos a hacer!).

Cortamos un trozo de papel celofán suficientemente grande, colocamos las galletas en el centro y subimos las cuatro esquinitas.




Atamos el lazo elegido haciendo una bonita lazada y colocamos los piquitos con mucho arte para que quede resultón.


¡Hasta aquí mi aportación del día! Aunque simple como ella sola, espero que os haya ayudado como idea para presentar vuestras galletas :-)

Muchas gracias por seguir conmigo y por vuestros comentarios. ¡¿Qué haría yo sin vosotros?!


martes, 17 de febrero de 2015

Sobaos pasiegos

¿Ya habéis preparado los moldes para los sobaos?

A ver... unos sí y otros no...


Para los que no tengáis los moldes ya listos para lanzaros a esta receta os recuerdo que en el post anterior os dejé un paso a paso para que los hagáis vosotros mismos. Son muy fáciles de hacer, creedme, aunque os cueste un poco entenderlo al principio, no os desaniméis y ya veréis que en nada os saldrán como churros :-)

Con esta receta salen entre 20 y 25 sobaos. El problema es que como el papel de hornear suele ser bastante endeble (depende de la marca), a no ser que el vuestro tenga suficiente consistencia, os recomiendo que pongáis doble papel para cada sobao. Así que, ánimo, solo necesitáis unos 50 moldes, jeje.
 
Todos aquellos que no os sintáis capaces de hacer los moldes o no tengáis tiempo para ello, no os preocupéis que tengo un plan B :-) No es la solución más vistosa pero siempre podéis extender la masa en la propia bandeja del horno cubierta con papel de hornear, hornearla como os indico en la receta y una vez enfríe, cortarlo en rectángulos. ¿Veis? Siempre hay solución para todo. ¡Ya no tenéis excusa para perderos esta delicia!


Ingredientes

250 g mantequilla en pomada
250 g azúcar
250 g huevos (unos 4 o 5 huevos)
250 g harina
16 g levadura química tipo Royal



Elaboración
 
Empezamos precalentando el horno a 180º con calor por arriba y por abajo.
 
Para que la mantequilla esté a punto pomada tenemos que sacarla de la nevera un buen rato antes de empezar a cocinar. Necesitamos que tenga una textura suave y manejable.

Empezamos batiendo la mantequilla para que termine de estar cremosa.

Añadimos el azúcar y batimos unos minutos hasta conseguir una masa integrada y homogénea.

Ahora incorporamos los huevos uno a uno. Hasta que no estén bien mezclados no añadiremos el siguiente.

Tamizamos la harina con la levadura y la incorporamos en dos o tres tantas, mezclándola con una espátula con movimientos envolventes.

Echamos la masa en una manga pastelera a la que le cortaremos la punta y ya estamos listos para ir rellenando los moldes hasta la mitad. Cuidado no echéis más de la cuenta porque sino se desbordarán.
 
(Si no os habéis atrevido con los moldes o no habéis tenido tiempo, forrad la bandeja del horno con papel de hornear y echad la masa directamente cubriendo de manera que la masa tenga una altura de medio centímetro o así).
 
Colocamos los moldes en la bandeja y la llevamos al horno precalentado unos 15 o 20 minutos. Vigilad el colorcillo que va adquiriendo para que no se pasen. Y ya tenéis lista la primera horneada :-)
 

 
Ya me contaréis cómo os salen y esos pedazo desayunos o meriendas con que os vais a homenajear :-)
 
Como siempre un beso enorme, mil gracias por leerme y un millón de gracias más por cada uno de vuestros comentarios.
 
 

lunes, 9 de febrero de 2015

Cómo hacer moldes para sobaos pasiegos

Ahora ya me puedo reír, pero no sabéis qué últimas semanas hemos pasado en casa...
 
Todo empezó un miércoles que operaban a mi marido de la garganta, nada serio pero muy incómodo porque después de la operación tenía que estar sin hablar NADA durante dos semanas. Un suplicio para una persona normal, un infierno para él, jeje, con lo que le gusta hablar...
 
Es la segunda vez que le operan así que ya sabíamos que nada de pizarritas con rotu para escribir porque aunque son muy prácticas, al cabo de un rato acabas con un colocón por el olor que no veas. Esta vez la solución ha pasado por tradicional cuaderno y boli y por el whatsapp. ¡Me ha colapsado el whatsapp! Además de escribir en el móvil y enseñarme lo que me quería decir, le daba al botón de enviar...jajaja, y lo mejor es que yo he llegado a contestarle por whatsapp teniéndole sentado a mi lado, jajaja. ¡Ha sido una locura!
 
Para liberar la ansiedad de apenas poder comunicarse, desde el día siguiente a la operación se volcó en el deporte. Decir que se volcó es una exageración. Dos días le duró su válvula de escape. El sábado jugó un partido de fútbol, le metieron un patadón y le hicieron una fractura de tibia. ¿Qué os parece?
 
 
¡Mudo y cojo!
 
Ya me puedo reír, pero vaya dos semanitas...
 
Ahora sigue medio cojo y sin poder hacer deporte pero ¡por lo menos habla!
 
Entre tanto estrés y ansiedad encontré un entretenimiento estupendo. Una manualidad súper sencilla y muy útil. Hacer moldes de papel para los sobaos pasiegos :-)
 
Una maravilla. Un desahogo relajante que me iba a servir luego para hornear unos deliciosos sobaos...

No es nada complicado de hacer pero sí de explicar. A ver si soy capaz  :-)

Material

Papel de hornear de medida 14 x 12 cm. (Yo aquí hago los moldes con un papel estampado para que se vean mejor los dobleces. Es más, estos moldes los podéis utilizar como simples cajitas).
Lápiz
Regla
(No nos hace falta ni tijera :-))

Instrucciones

1

Empezamos cortando el papel con las medidas deseadas. Como yo lo voy a utilizar para hacer moldes para sobaos pasiegos, lo corto 14 x 12 cm.
 
Para ello y para no utilizar ni tijeras, marco primero los 14 cm dos veces en el papel a distintas alturas, coloco la regla de manera que pase por ambos puntos y sujetando firmemente la regla, rasgo el papel (veis, ¡ni necesitamos tijera!).
 
Marco después dos marcas de 12 cm y procedo de igual manera para cortar.
 
Ya tengo mi rectángulo preparado.

2
 
Marcamos 1,5 cm en uno de los lados más largos por dos sitios. Apoyamos la regla haciéndola pasar por ambos puntos y sujetándola firmemente la utilizamos como guía para hacer un doblez al papel.
 
Hacemos lo mismo con el otro lado largo del rectángulo.
 
3 

 
Damos la vuelta al papel de manera que los dobleces queden abajo.
 
Levantamos uno de los lados doblado para conseguir otro doblez tipo acordeón. Mirad la tercera foto del collage de arriba, a ver si así lo entendéis mejor.
 
Hacemos lo mismo con el otro lado largo. Así tenemos el rectángulo con una especie de acordeón a cada lado.

4
 
Con el "acordeón" hacia arriba, en uno de los lados cortos marcamos 1,5 cm en dos sitios. Con ayuda de la regla, hacemos el doblez.
 
Repetimos en el otro lado corto.

5
 
¡Empezamos con el montaje!
 
Desdoblamos uno de los lados largos y, con él, los dos cortos. ¡Que no me he vuelto loca ni os he tomado el pelo!  Que no hemos trabajado en balde :-) Las marcas de los dobleces nos servirán ahora de guía para montar la caja.
 
Con el doblez levantado desde la marca de los 3 cm presionamos el lateral exterior desde abajo doblándolo hacia adelante guiándonos por la marca vertical, de manera que el lado corto se doble hacia adelante. Al hacerlo, guiaros por las marcas de los dobleces verticales y horizontales y veréis que la parte de abajo monta un triangulito.
 
Aunque este último párrafo parece un jeroglífico, leedlo despacio y lo iréis entendiendo. En serio, haced un esfuerzo. Fijaos en las fotos en cómo tiene que ir quedando. Que merece la pena :-)
 
6
 
Esto habrá que hacerlo con las cuatro esquinas.

7
 
Una vez lo hemos hecho en las cuatro esquinas, bajamos las pestañitas largas y ya tenemos montada la caja.
 
Ya solo nos queda repasar todas las aristas para que quede bien estable.
 
Y, ¡tachán! Ya tenemos listo nuestro molde.
 
 
Ahora solo queda repetir la operación unas 40 veces :-) Que sí, que no son muchas. Ya veréis que a medida que vayáis haciéndolos os saldrán solos, como churros, hasta sabréis calcular el centímetro y medio a ojo. Además, seguro que 20 sobaos luego os saben a poco :-)
 
Id practicando con estos moldes, que en breve os traeré la receta de los sobaos y desde ya os digo que están riquísimos :-)
 
Un beso enorme y muchas gracias por leerme.