jueves, 7 de noviembre de 2013

Crepes para desayunar, merendar...

Me encantan los desayunos de los fines de semana. No se parecen en nada a los de los días que tengo que saltar de la cama en cuanto suena el despertador, dirigirme medio zombi al baño, ducharme, vestirme a toda máquina y engullir unas galletas rápidamente con un té que, con un poco de suerte y si no quema mucho, puedo acabar antes de salir pitando al trabajo.

Y es que los fines de semana son relajados. Me puedo permitir el lujo de remolonear en la cama y salir de ella con calma. Ir a la cocina y prepararme el desayuno que más me apetece.


Vaaaale. No todo es tan idílico. En vez de despertarme el despertador, suelen ser mis enanos los que tocan diana pero por lo menos tienen la decencia de no hacerlo antes de las ocho de la mañana :-)

Y sí, mi marido y yo preferimos darles de desayunar a ellos primero para así ir haciendo hambre y tener tiempo para que él baje a por el pan y el periódico y podernos dar un homenaje para empezar el día.

Y aunque el pan con tomate es el rey del ránking, de vez en cuando nos encanta desayunar dulce, ¡cómo no!

Así que hoy se me ha ocurrido haceros una sugerencia para el desayuno del fin de semana: CREPES.

Es una idea genial porque puedes dejar preparada la masa la tarde del viernes, guardarla en un biberón en la nevera, prepararla el sábado por la mañana para tomarlas recién hechas calentitas, guardar lo que sobre en la nevera, y volver a desayunarlas el domingo. Hmmmmm, ¡¡maravilloso!!


Ingredientes

130g harina
Una pizca de sal
25 g azúcar
2 huevos (a temperatura ambiente)
300 ml leche (a temperatura ambiente)
1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
25 g mantequilla derretida

Elaboración

A mano con varillas manuales 

Derretir la mantequilla en el microondas y dejar templar.
Tamizar la harina. Añadir la pizca de sal y el azúcar. Reservar.
Batir los huevos e incorporar la leche. Echar la mantequilla derretida que estará a templada. Añadir el extracto de vainilla (opcional).
Ir echando los ingredientes líquidos en el bol de los ingredientes sólidos, poco a poco, removiendo a la vez.
Conviene colarlo para evitar que se queden grumos.

Con batidora eléctrica

Es tan sencillo como meter todos los ingredientes en el vaso de la batidora y batir durante unos segundos hasta conseguir una masa homogénea.



Sea como fuere que hayáis preparado la masa, es momento de dejar que repose.

Si estamos deseando comer YA las crepes,  cubriremos el bol con film transparente y lo dejaremos reposar en la encimera unos diez o quince minutos mientras aprovechamos para poner la mesa :-)

Si preparamos la masa con antelación, guardaremos el bol tapado en la nevera. Se conserva estupendamente un par de días.


Para hacer las crepes, podemos bien verter directamente la masa con una cuchara, bien echarla en un biberón que nos facilite su manejo.  Guardar la masa en la nevera metida en un biberón es un buen consejo porque ocupa menos y así ya la tenemos lista para utilizar.

Pondremos la sartén al fuego con un poco de mantequilla que extenderemos por toda la sartén. Cuando esté caliente, verteremos un poco de masa en la sartén moviéndola para que la masa se extienda bien y llegue a toda la superficie. Conviene que echemos poca masa: la justa para cubrir la superficie de la sartén. Así obtendremos unas crepes finitas y suaves.

Dejaremos hacerse la crep hasta que los bordes empiecen a curvarse. Entonces podemos levantarla un poco para ver si ya está hecha. Si ya está doradita, le daremos la vuelta y dejaremos que se haga por el otro lado.

Solo añadiremos un poco de mantequilla cada vez que vayamos a hacer una crep nueva.

Ahora, la manera de comerlas la dejo a vuestra imaginación :-)  Con Nocilla, Nutella, mermelada, azúcar y limón, enrolladas, dobladitas, con cuchillo y tenedor, con las manos...

Eso sí, ¡siempre deliciosas!

Esta receta es de Stephanie, de la maravillosa Web Joy of Baking. Aunque está en inglés :-), para los que no lo entendáis, no os preocupéis. Una imagen vale más que mil palabras. ¿O no?


Millones de gracias por leerme y si encima me dejáis un comentario, me hacéis más feliz que un regaliz :-)