martes, 11 de septiembre de 2012

Cupcakes de chocolate y proyecto de mini tarta

Ya sé que después de enseñaros los cupcakes tan elaborados y con diseños tan chic que he hecho en los talleres de Alma y de Loleta, estos cupcakes os van a parecer muy  simplones...

No tienen una gran elaboración en la presentación del buttercream, ya lo sé, pero a mí me gustan :)


Horneé 24 mini cupcakes, todos hechos con la receta de cupcakes de vainilla infalible versión 2.0 de Alma.

Tenéis que probar a hacer los cupcakes con el broche final de pintarlos con un almíbar de azúcar... ¡Es increíble el puntito jugoso que les da!

Para el buttercream de estos cupcakes utilicé la receta de Alma (solo la mitad de los ingredientes que pone) mejorada, para una mitad, con chocolate negro, y, para la otra, con chocolate blanco. (Al buttercream se le añade al final el chocolate, unos 50 g bastan, derretidos al baño maría y templados)




Con la masa que me sobró, horneé un bizcochito pequeño que también pinté con almíbar.

Y, como la vida no me da para más, no me quedó más remedio que meterlo en un tupper chiquitín, redondito, y dejarlo a la espera de tener tiempo para decorarlo.

Así pasaron dos días, con mi mini bizcocho bien guardadito en el tupper. Y yo piensa-que-te-piensa en cómo decorarlo. Tenía un montón de ideas en la cabeza... Que si nada de fondant por esta vez, que si le podía poner un delicioso relleno con buttercream de chocolate negro, que si podía decorarlo con  flores de buttercream de colores por arriba,...



Y, al tercer día, estoy en mi oficina trabajando por la mañana y me llama mi marido:

- ¡Qué bien he desayunado hoy!

- ¿Ah, sí?

- Sí, me he encontrado un bizcocho en la encimera...

-¿Quéeee? ¿¿¿¿¿Te has comido mi proyecto de tarta????? ¡¡¡¡¡Noooo!!!!!



Y, colorín colorado, el cuento de mi mini tarta acabó antes de empezar.

Para otra vez será. Por lo menos, el bizcocho dio buen juego para un par de desayunos ;)



Y no os preocupéis por mi marido, no me enfadé tanto, ya no tenía remedio...


jueves, 6 de septiembre de 2012

¡Ya estoy en Facebook!

Pues sí, le hago una entradita entera a mi logro personal de haber conseguido hacer una página de fb para mi querido blog A la hora del té y haber sido capaz de agregar la caja de "Me gusta" :)


¡Me siento más que orgullosa!

Ahora no os olvidéis de darle al botón de "Me gusta" para que cada día seamos más y podamos seguir compartiendo...

¡Bienvenidas las nuevas tecnologías que permiten que todos nos sintamos más cerca!
¡¡¡Muchas gracias a todos!!! ^_^

lunes, 3 de septiembre de 2012

Mariposas de cumpleaños

Hacía muchos años que no iba allí. Muchos. Desde que estudiaba la carrera.

Fuimos el sábado por la noche a cenar para celebrar mi cumpleaños. Mi marido y yo. Cena sorpresa.


Antes íbamos bastante a menudo. A cenar, sobre todo. Y nos encantaba. Creo que a mí más que a él. Y ayer, volvimos.

En vez de tener la sensación de cumplir años, me embargó una sensación de retroceso al pasado.

Nada sustancial había cambiado. Casi aseguré que las cartas eran las mismas…

-         Imposible. Cuando veníamos aquí todavía pagábamos en pesetas- me contradijo mi marido.

-         Pues es verdad- tuve que admitir. Pero, salvo el precio, eran calcadas. La misma estructura, los mismísimos platos…


Así, no tuve ni qué pensar para elegir. Lo de siempre: ensalada de pollo para compartir y crep de ahumados de principal.

Y la cocina (¡increíble!) no había cambiado en absoluto. La misma presentación e idéntico sabor.

Fue delicioso. Resulta reconfortante ver que hay cosas que no cambian, que aunque vivimos en una trepidante vorágine, en un no parar, en una espiral que discurre muuucho más rápido de lo que podemos asimilar, hay cosas que permanecen y nos dan un respiro :)


Y, entre todo el caos que ha sido esta última semana para mí, he arañado tiempo para hacer unas bonitas galletas de cumpleaños. ¡Qué menos!

Sí, sí. Toda la semana para hacer las galletitas.¡Qué exageración, verdad? Pues, sí. El domingo pasado hice la masa, hasta el martes por la noche no pude hornearlas, por fin, entre el viernes y el sábado las decoré, y el sábado por la mañana me dediqué a hacerlas una bonita presentación...


Al final, lo conseguí. Logré tenerlas a tiempo para poder compartirlas ayer con parte de mi familia :)

Y, esta vez, con un plus añadido: las empaqueté una a una en bolsitas de plástico, les hice una pestañita con papel charol que recorté con tijeras de picos y les até un lacito...

¿¿No os parece que quedaron muy monas??